Dice le refrán que la primavera la sangre altera, ya sea mito o realidad es cierto que esta estación produce cambios importantes en nuestro organismo. El cambio de temperatura y el aumento de las horas de sol nos afecta a todos en mayor o menor medida.
La astenia primaveral surge por el cambio de estación de invierno a primavera. Sus síntomas más característicos son la sensación de cansancio, agotamiento, malestar e incluso depresión. Algunos especialistas declaran que literalmente la sangre se altera en la primavera, se produce una disminución en las betaendorfinas del plasma sanguíneo, esta sustancia es la encargada de mantener el equilibrio entre el bienestear malestar.
Nos afecte o no lo mejor que podemos hacer es seguir estos consejos.
- no alterar los horarios del sueño
- mantener una alimentación sana
- practicar deporte
- practicar ejercicios de relajación
- en algunos casos podemos complementar la alimentación con alimentos energéticos como los dátiles, frutos secos, plátano, o incluso polen, jalea real o levadura de cerveza
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